La más importante de todas es que la Mutua incluye en estas pólizas una cláusula de renuncia a repetición contra la Dirección de Ejecución de obra, cuando el profesional tenga su Seguro de Responsabilidad Civil Profesional en la Mutua. Esto supone que, si el Seguro Decenal se contrata en MUSAAT, cualquier patología en el edificio que tenga su causa en una garantía cubierta por la Póliza Decenal no será objeto de reclamación contra el profesional que llevó la Dirección de Ejecución de Obra, mientras que si el promotor contrata el Seguro Decenal en cualquier otra aseguradora lo habitual es que éstas, después de pagar el daño, reclamen al profesional como potencial responsable de ese daño. El Aparejador evita así las consecuencias de ser demandado en procedimientos habitualmente judiciales, así como salir perjudicado en las condiciones económicas futuras de su póliza de responsabilidad civil (bonus/malus).
La mejor forma de que el profesional consiga esta ventaja es presentar al promotor la alternativa de la Mutua, con la mediación y ayuda de la Sociedad de Mediación de su Colegio Profesional. El promotor también gana, porque:
Por tanto, a través de los Colegios Profesionales y de sus Sociedades de Mediación, el colectivo de Aparejadores/AT/IE puede aportar al promotor una reducción de costes, así como una seguridad en la calidad de la póliza que legalmente está obligado a contratar.